La pandemia y las restricciones de movilidad han hecho que viajemos mucho menos o incluso que no se pueda viajar. Pero esta situación provocada por el COVID19 ha tenido un lado positivo que muchas personas han sabido aprovechar: convertirse en turistas dentro de su propia ciudad, apostando por un «turismo de Km0».

Lo que tenemos más a mano, a veces, nos puede resultar hasta desconocido. La rutina, la falta de tiempo o de atención puede hacer que nos perdamos verdaderas joyas que tenemos al ladito de casa. Como siempre os recomendamos en Bambando, «levantad un poco la vista y descubriréis una parte nueva de la ciudad».

Descubre lo más cercano

Así, hay toda una corriente de recomendaciones para esos turistas vocacionales «atrapados» en su propia ciudad, pero que no quieren dejar su pasión. Porque, no por cercano, hay que dejar mostrar interés por la historia que nos rodea. Y todos, absolutamente todos los pueblos y ciudades encierran un montón de historias que contar y rincones que descubrir.

Os dejamos algunos de esos ejemplos que muchos comparten para los «turistas locales», y que os pueden servir en los próximos días como el mejor plan en la ciudad de Castelló, en alguno de nuestros maravillosos pueblos, en la fantástica zona costera y el interior fascinante de nuestras comarcas… ¡O en cualquier parte del mundo, claro!

8 Consejos para ser un turista en tu propia ciudad: 

1.- Haz un tour acompañado siempre de un guía oficial: los guías estamos formados para hacer que cada persona descubra justo los aspectos de la ciudad que más le interesan. Contrata SIEMPRE los servicios de un Guía de Turismo Oficial allá donde vayas.

2.-Prepara tus rutas en la oficina «Tourist Info»: No; en las oficinas de turismo no está prohibida la entrada de gente de la propia ciudad… Allí puedes encontrar mapas, folletos con rutas, directorios de empresas y los mejores  consejos de su personal.  Aquí tienes también un avance en la web del Patronat de Turisme de Castelló.

3.- Recorre la ciudad en un medio de transporte diferente. Prueba a subir en una línea de bus que no hayas cogido nunca, ponte unos auriculares y tu música favorita y  podrás disfrutar de un paseo con una perspectiva que te sorprenderá.

4.- Museos de cercanía. ¿Cuánto hace que no visitas ese Museo que tienes al lado de casa? La cultura siempre te espera. Y los museos son pequeños oasis para turistas y visitantes, con muchos tesoros que descubrir.

5.- Lee la arquitectura. La arquitectura nos habla del paso del tiempo a través de las fachadas, las puertas, la decoración de los edificios, desde palacios deslumbrantes a humildes refugios de pastor. Trata de «leer» cuántos episodios diferentes componen tu entorno inmediato.

6.- Saborea los productos locales. Quizá no recuerdes si esa fachada de la iglesia que destaca en la Plaza Mayor es gótica o renacentista, pero lo que sí recodaras es el sabor de las tapas que degustaste en el bar de la propia plaza. Los productos, los sabores y la gastronomía nos unen al territorio. Si vienes por aquí, no dejes de consumir productos y servicios de «Castelló Ruta de Sabor».

7.-Haz fotos y enséñalas al mundo. Antes no salías de casa con la cámara cuesta a diario. Ahora sí, porque todos llevamos el teléfono móvil encima. Aprovecha y retrata todo lo que te despierte interés, desde el ambiente del mercado, pasando por esa casa con un balcón pintoresco  o una bonita puesta de sol. Comparte en redes sociales tus imágenes y conviértete en un verdadero embajador de tu tierra.

8.- Sé buen vecino. Hay veces que tenemos «desatendidos» a nuestros vecinos. Las poblaciones de tu comarca y del resto de tu provincia son también un lugar perfecto para hacer turismo ya que es posible que desconozcas muchos de sus atractivos. Recorre unos pocos kilómetros y  descubre las diferencias entre municipios y también las cosas que compartes con sus habitantes. Si la hay, empieza tu recorrido en la oficina de turismo.

BONUS: Y… ¿por qué no pasar una noche fuera de casa alojados en un hotel o en una vivienda alquilada? A nadie le viene mal despertarse y encontrarse con el desayuno preparado, ¿verdad?